Los menores con parálisis cerebral que son atendidos en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), tienen mejor calidad de vida al recibir tratamiento con toxina botulínica, que les permite mejorar actividades como caminar, moverse o interactuar con el medio en el que se encuentran.
Esta terapia consiste en administrar de 3 a 5 dosis en promedio, de acuerdo con la edad y el peso del paciente, explicó Rodrigo Pérez Rico, médico del IMSS adscrito a Ortopedia Pediátrica del Hospital de Traumatología y Ortopedia “Victorio de la Fuente Narváez”.
La toxina botulínica se aplica mediante inyección intramuscular en la zona afectada para mejorar sus funciones motoras y musculares; sus beneficios pueden durar de cuatro a seis meses, según la movilidad del menor. Al término de ese periodo se mejoran las funciones del paciente, precisó el especialista encargado de la Clínica de Toxina Botulínica, donde reciben atención niños de dos a 17 años de edad.
Los candidatos a esta terapia son valorados en consulta externa de esa unidad, ubicada en el norte de la Ciudad México, donde les realizan una historia clínica que ...